La candidata a constituyente por escaños reservados por el Pueblo Aymara está convencida que se abrirán nuevas condiciones en la Convención Constitucional. “Sin duda -señala- espero que sea una nueva relación, pero para lograrlo deben existir condiciones básicas, como el reconocimiento de nuestra condición de pueblo-nación indígena, con derechos colectivos que el Estado debe garantizar y promover”.
Delia Norma Condori Flores, Ingeniero Comercial y Contador Auditor, es candidata a Constituyente por escaños reservados por el Pueblo Aymara. Como reconocimiento a su labor dirigencial hoy ejerce el cargo de Consejera Aymara del Consejo Nacional Aymara Mallkus y T´allas de la comuna de Putre e integrante, además, del Consejo Directivo ADI Alto Andino de la Región Arica Parinacota. Complementan su formación profesional, entre otros diplomados, el de Liderazgo Femenino Indígena del Fondo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas de América Latina y El Caribe (FILAC) y otro relativo a la Violencia contra las Mujeres en Política en Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales Argentina (FLACSO Argentina). Estas son sus ideas para la nueva etapa que vivirá la sociedad chilena.
Considerando su eventual trabajo en la Convención Constitucional, ¿cuál es su propuesta para garantizar la participación efectiva de las asociaciones y comunidades indígenas en el proceso de deliberación constituyente?
-Espero mantener canales disponibles para entregar información y recoger las opiniones del pueblo aymara, sus organizaciones y pueblos. Dentro de mis compromisos está transmitir sus deliberaciones y siempre consultar antes de manifestar o defender una propuesta, la idea es llevar el proceso con mis jilatanaka y kullakanaka, acompañándonos para darle legitimidad al proceso.
Desde la perspectiva de los derechos colectivos y su actual consagración, ¿puede indicar las fuentes de los derechos de los Pueblos Originarios que deberían servir de referencia obligada en el debate constituyente?
-El más importante es el actual Convenio 169 de la OIT, que se complementa con la Declaración de la Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas y la reciente Declaración Americana sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas de la OEA, sin olvidar lo que ha dicho la Corte Interamericana de Derechos Humanos en sus fallos sobre nuestros derechos.
Si solo se pudieran estipular 3 derechos fundamentales relativos a los Pueblos Originarios, ¿cuáles elegiría?, ¿por qué?
-El derecho a la libre determinación como pueblos originarios, derecho a la participación política y el derecho a nuestra identidad cultural con todo lo que eso implica.
Siendo el reconocimiento estatal, de las primeras naciones, una demanda largamente anhelada por los Pueblos Originarios, ¿cómo debería consagrarse en la nueva Carta Fundamental? y ¿cuáles deberían ser sus alcances?
-Un reconocimiento que defina a un nuevo Estado, que al interior de sus fronteras conviven diversas pueblo-naciones que no sea una declaración de buenas intenciones y por supuesto debe estar acompañado de herramientas para tomar el control de nuestra cultura, territorios, instituciones de manera autónoma, quizás no totalmente pero de manera creciente según lo que cada pueblo decida.
La participación es un derecho humano fundamental, en el caso de los Pueblos Originarios ¿cómo se debería materializar este derecho en el nuevo orden constitucional?
-A través de dos modalidades, la consulta indígena con el objetivo de lograr el consentimiento, libre, previo e informado de nuestros pueblos y también con representantes nuestros en los diversos niveles: local, regional y nacional, donde se tomen las decisiones.
En relación al resultado del proceso constituyente, ¿cuál debería ser la relación entre el Estado y los Pueblos Originarios bajo la nueva Carta Fundamental?
-Sin duda espero que sea una nueva relación, pero para lograrlo deben existir condiciones básicas, como el reconocimiento de nuestra condición de pueblo-nación indígena, con derechos colectivos que el Estado debe garantizar y promover. El respeto se logra, a mi juicio, sobre la base de la igualdad y no discriminación y esa debería ser nuestra meta como pueblos, luchando siempre de manera articulada, todos los pueblos, con ese fin.
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